

Orizaba.- Una mujer de 85 años de edad fue embestida por un autobús de la línea AU cuando intentaba cruzar la avenida Oriente 31; el chofer responsable se detuvo y pidió la asistencia de los paramédicos de la
Cruz Roja.
La señora Esperanza Trejo Domínguez no quería ser atendida y mucho menos causarle contratiempos a los pasajeros del autobús, sin embargo, los testigos del percance y las autoridades viales le recomendaron ser valorada por los paramédicos, para descartar un golpe importante.
Según el informe, estos hechos ocurrieron alrededor de las 15:00 horas cuando Esperanza se dirigía a su vivienda ubicada en calle Gomez Farías de la colonia El Espinal.
Caminaba sobre la Oriente 31, también conocida como Circunvalación, y al ver que el semáforo ubicado en la esquina con calle 20 de Noviembre estaba en rojo, quiso cruzar la calle.
La mujer tiene su caminar lento, por lo que el señalamiento cambió al verde y los automóviles comenzaron a avanzar.
Esperanza caminaba sobre el paso peatonal, pero repentinamente el camión número económico 4586 de la línea Autobuses Unidos (AU) que circulaba con dirección al norte de la ciudad avanzó y logró golpear a la mujer con la parte trasera del vehículo.
La mujer fue lanzada al menos dos metros hasta quedar tendida a un costado de la banqueta, por lo que el conductor de la unidad se detuvo y descendió del autobús para verificar el estado de salud de
Esperanza.
Elementos de Tránsito enseguida se presentaron en el lugar del accidente y solicitaron la presencia de los paramédicos de la Cruz Roja, los cuales llegaron a los pocos minutos.
Aparentemente el chofer del AU se comprometió a cubrir los gastos médicos, aunque según dijo, él no tuvo la culpa pues fue la señora la que se estrelló contra el camión.
Los técnicos en urgencias médicas de la benemérita institución corroboraron que la señora tenía contusiones en diversas partes del cuerpo, por lo que fue trasladada al sanatorio Escudero para descartar heridas que pongan en riesgo su vida.
Será el perito de Tránsito el encargado de determinar si el operador del AU tiene alguna responsabilidad en este percance.
GUILLERMO RAMOS T.
El Buen Tono
