


Cd. de México.- La información derivada de las evaluaciones previstas en la Reforma Educativa, por las que decenas de miles de profesores de diferentes estados del país se han inconformado durante meses, no están siendo utilizadas para el diseño de las políticas públicas, por lo que está en riesgo el objetivo de que estas pruebas incidan en el mejoramiento de la calidad de la educación en México.
Tal es la conclusión de dos auditorías de desempeño hechas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a las Evaluaciones de la Calidad de la Educación Básica y Media Superior aplicadas en 2014 por el Instituto Nacional de la Evaluación Educativa (INEE).
“En opinión de la Auditoría Superior de la Federación, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el INEE no cumplieron con el objetivo de utilizar los resultados de las evaluaciones de la calidad de la educación básica para la toma de decisiones de las autoridades educativas con el propósito de emitir directrices y formular políticas, a fin de contribuir en la mejora de la calidad educativa, ya que al cierre de 2014 el INEE no emitió directrices para mejorar la calidad educativa; mientras que la SEP no acreditó la utilización de la información derivada de las evaluaciones para la formulación de políticas”, dice el dictamen de la auditoría a nivel básico, cuyos términos se repiten para el resultado del nivel medio superior.
“En consecuencia, prevalece la falta de políticas integrales diseñadas a partir de los resultados de las evaluaciones de la calidad, y que las autoridades educativas no cuenten con información suficiente, pertinente y confiable que apoye la toma de decisiones, lo cual incide en la calidad de la educación”, agrega.

