


De la Redacción
El Buen Tono
ORIZABA.- A pesar de que la titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), Luz Mariela Zaleta Mendoza, aseguró que tienen identificados todos los tiraderos a cielo abierto y prometió una estrategia contundente para erradicarlos, en el municipio de Fortín se tiene registro de una planta separadora de residuos que opera ilegalmente con el aval de las autoridades municipales, al mando de Gerardo Rosales.
Ciudadanos han denunciado lo que todo mundo lo sabe, la Sedema ignora las operaciones clandestinas de este sitio, que recibe diariamente toneladas de basura sin permisos ni controles ambientales.
Este viernes, la titular de la Sedema estuvo en Orizaba en una entrega de reconocimientos a brigadistas combatientes, dijo que la dependencia trabajará con los nuevos gobiernos municipales para implementar acciones respecto a los tiraderos ilegales. Sin embargo, en Fortín la planta en cuestión opera en un terreno no autorizado, donde se acumulan residuos sin clasificación, se queman materiales tóxicos al aire libre y se contaminan suelos y mantos acuíferos.
De acuerdo a testimonios, no existe documentación que avale su funcionamiento como centro de gestión de residuos, y no existe una supervisión sanitaria, mientras que en la zona se liberan sustancias como plomo y dioxinas. Pese a las denuncias presentadas desde abril de 2025, la Sedema no ha inspeccionado el sitio ni emitido órdenes de clausura, la omisión contradice su discurso de “transparencia y legalidad” y refleja un problema sistémico, la dependencia permite operaciones que empeoran la crisis climática. La planta de Fortín es un síntoma de la descoordinación entre discursos oficiales y acciones reales en materia ambiental. Si la Sedema insiste en “hacerse mensa”, Veracruz seguirá pagando con salud y recursos naturales los costos de la negligencia.


