De la redacción
El Buen Tono
Córdoba.– El regidor octavo Erick Alberto Gasca Morales se ha convertido en un ejemplo de simulación y abandono en el ayuntamiento, pese a su sueldo mensual que supera los 90 mil pesos. Como funcionario, está obligado a atender las necesidades de los cordobeses, pero ha demostrado que sólo sabe cumplir favores. Protegido de la síndica Vania López, presume independencia, aunque todo le aprueba al alcalde y a la síndica, siendo de otro partido en donde ¡según era oposición!
Incapaz de tolerar críticas, recurre a perfiles en redes sociales a través del uso de bots, que son cuentas automatizadas que simulan ser usuarios humanos, con los que se echa porras haciendo creer a la ciudadanía que lo apoya mucha gente, cuando en realidad usa esas redes para ‘defenderse’ e insultar.
Una de sus decisiones aprobadas en cabildo es la polémica medida de cobrar el servicio de recolección de basura a escuelas. Encabeza las comisiones de Comercio, Desarrollo Económico, Mercados y Rastro Municipal, donde su presencia y resultados son nulos. Locatarios de La Isla y Revolución aseguran que jamás ha recorrido sus pasillos y envía a sus asesores. Al Rastro Municipal tampoco va, pese a las condiciones insalubres, y concentración de moscas, grave riesgo sanitario.
Gasca Morales había señalado que Rodolfo Delfín, coordinador de Comercio, le rendía cuentas a Vania López, sin embargo, nunca hizo nada para frenar esta situación ni para evitar las irregularidades vinculadas a ese funcionario. Respecto al desfalco en el Centro de Bienestar Animal, tampoco se pronuncia, reforzando la percepción de que evade temas para no incomodar al gobierno municipal. En cambio, presume viajes al Medio Oriente y otros lujos personales.
