

En medio del bloqueo total que sufre la Franja de Gaza desde marzo, un rayo de esperanza ha comenzado a abrirse paso. Este miércoles por la noche, un total de 87 camiones con ayuda humanitaria lograron ingresar al territorio palestino, según confirmó el Gobierno gazatí en un comunicado.
Los vehículos transportaban una variedad de suministros esenciales que ahora están siendo distribuidos por organizaciones internacionales y de la sociedad civil, como parte de un esfuerzo coordinado para aliviar las urgentes necesidades del pueblo palestino.
Harina, comida para bebés y medicinas llegan a su destino
Fuentes locales informaron a EFE que la distribución ya ha comenzado en panaderías de Jan Yunis, Deir Al Balah, Zawaida y Nuseirat. Gracias a esto, por primera vez en semanas, algunas familias podrán acceder nuevamente a pan, en un contexto de severa escasez de alimentos, combustible y medicamentos.
La ayuda, que ingresó por el cruce de Kerem Shalom, incluye:
- 67 camiones del Programa Mundial de Alimentos (60 de ellos con harina)
- 18 camiones de UNICEF con comida para niños
- 5 camiones con suministros para panaderías
- 1 camión con medicamentos destinado a la Cruz Roja
Inspección estricta y cruce vigilado
El organismo militar israelí COGAT, que regula el acceso de ayuda a Gaza, confirmó que 100 camiones en total lograron cruzar este miércoles, incluyendo algunos de la ONU. Todos fueron inspeccionados rigurosamente antes de ingresar.
La Asociación de Transportistas Privados de Gaza aseguró que “la gran mayoría cruzaron sin problemas a las gobernaciones de Jan Yunis y Deir Al Balah”, permitiendo que incluso la harina llegara directamente a las panaderías.
Un movimiento bajo presión internacional
Israel, que mantiene un bloqueo total desde el 2 de marzo, habría cedido a permitir una “entrada mínima” de ayuda humanitaria ante la creciente presión internacional y el temor a una crisis alimentaria masiva que podría erosionar el respaldo militar y diplomático de sus aliados.
Mientras continúan los bombardeos y ataques en el enclave, el paso de estos camiones representa, aunque sea de forma limitada, un respiro para miles de personas atrapadas en una situación humanitaria crítica.
