

Agencias
EU.- La Universidad de Harvard presentó este viernes una demanda en el tribunal federal de Massachusetts contra el gobierno de Donald Trump, tras la decisión de impedir que la institución inscriba a estudiantes extranjeros. Con esta acción, Harvard busca frenar la prohibición emitida el jueves por el Departamento de Seguridad Nacional, que revocó la certificación de la escuela para el programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (visas F-1 y J-1), dejando a casi 6 800 alumnos internacionales —el 27 % de su matrícula— en riesgo de perder su estatus legal.
En su demanda, Harvard califica la medida de “ilegal e injustificada” y pide al tribunal que restablezca de inmediato su facultad para aceptar nuevos estudiantes foráneos. “Este golpe no solo amenaza el futuro de miles de académicos y estudiantes, sino que también envía un mensaje alarmante a quienes eligen a Estados Unidos para continuar su educación”, declaró el presidente Alan Garber. La universidad afirma que ha cumplido con los requisitos federales durante más de siete décadas y subraya que esta decisión carece de “proceso ni causa” válidos.
El enfrentamiento se produce en medio de otras presiones: el gobierno ya había congelado 2 600 millones de dólares en fondos federales a Harvard y amenaza con revocar sus exenciones fiscales, además de exigir reformas en gobernanza, admisiones y contratación de profesores, en respuesta al manejo —según la Casa Blanca— de casos de antisemitismo en el campus. Tras el anuncio, las acciones de varias universidades y organizaciones educativas han expresado su preocupación por el precedente que esta política podría sentar en la educación superior de Estados Unidos.
