
Córdoba.- La Asociación Mexicana de Médicos Familiares y Médicos Generales A.C., acusó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) y a la Secretaría de Salud (SS) de corrupción, tras interferir y dar prioridad a grupos no reconocidos para certificar y recertificar a los galenos.
Aunque el proceso aún no es de carácter obligatorio, se teme que al buscar el reconocimiento, se conviertan en víctimas de fraude.
A nivel nacional, se tiene un censo de aproximadamente 120 mil médicos familiares y generales, de los cuales, 54 mil están integrados en la Asociación Mexicana de Médicos Familiares y Médicos Generales, de éstos, sólo un 30 por ciento han cumplido con el proceso de certificación y recertificación.
De acuerdo con el presidente nacional de los médicos, Armando Gregor López, desde hace varios años se viene hablando de que la certificación va a ser obligatoria, sin embargo, y aun cuando no se tiene una fecha exacta para el arranque del proceso oficial, la SEP es la encargada de supervisar las certificaciones de profesiones.
Explicó que para poder emitir el reconocimiento de certificación, se tienen que cubrir ciertos requisitos, el riesgo es que hay grupos que se asumen certificadores de los médicos familiares que desafortunadamente no han cumplido y han aprovechado posiciones dentro de la estructura gubernamental, para obtener una ventaja sobre aquellas que llevan un largo tiempo en el proceso.
Abundó que la certificación y recertificación se hace a través de colegios de profesionistas para sus agremiados, es decir, con sus iguales durante cada cinco años, pues se considera un lapso adecuado para actualizarse en los niveles de conocimiento, pues si no cumplen están atrasados. Insistió que aun cuando el problema con las secretarías no es reciente, hubo la amenaza de que aquellos que no se certifiquen quedarán fuera y hasta sanciones les pondrían.
Sin embargo, reiteró quer se trata de grupos que no cuentan con documentos que avalen como médico general o especialista en certificación.
Aunque aseguró que no se tiene una estadística de cuántos facultativos han sido engañados al cobrarles hasta cinco mil pesos por una certificación. A nivel nacional el colegio “Luis Arturo Zavaleta” es el único que cuenta con validez y reconocimiento oficial para la certificación de médicos generales y familiares, así como otros especialistas.
