Nogales.- Tras los señalamientos de contaminación por el desfogue de lixiviados, el subprocurador de asuntos jurídicos de la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente, Mauro Jorge Mora Pavón, autoridades de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la apoderada legal de la empresa Constructo, Claudia Canales, realizaron una inspección de más de dos horas en el Relleno Sanitario Regional de las Altas Montañas.
Las autoridades ambientales y sanitarias, al igual que la empresa Constructo no permitieron el acceso al lugar a las autoridades municipales y al representante de Alianza Ciudadana, Roberto Huerta Abad y a la agrupación de pobladores de la congregación El Encinar, que el lunes pasado evidenció el derrame de lixiviados.
El Subprocurador señaló que se trató de una segunda visita al Relleno Sanitario, la cual fue impulsada por las quejas ciudadanas que se han difundido a través de diversos medios de comunicación, ya que dijo que hasta el momento la Procuraduría no tiene ninguna queja formal.
Indicó que tras la inspección, autoridades ambientales analizarán las posibles inconsistencias para realizar las investigaciones pertinentes, precisó que si detectan alguna falta se aplicarán las sanciones que marca el artículo 212 de la Ley Estatal de Protección Ambiental, que van desde 50 veces hasta 20 mil veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA).
“Si se encontrara alguna irregularidad como el derrame de lixiviados que se ha señalado en los medios, se hará lo conducente que marca la normativa de la Sedema que fue la dependencia que dio el permiso de operatividad al Relleno Sanitario y de nosotros como inspección ambiental. En el Relleno Sanitario de la localidad de Pinotepec de Emiliano Zapata, ya ocurrió algo similar y se sancionó a los responsables”, finalizó Mora Pavón.
