


Córdoba.- La juez Ludivina García Rosas, dejó en libertad al asaltante de la empresa Metro, Carlos Vázquez Sánchez, pese a que se presentaron varias pruebas y existen testigos que lo señalan a él como uno de los responsables del robo de $178 mil pesos.
Pero no es de admirarse, pues esta misma juez ya ha sido cambiada de residencia en varias ocasiones por sus descarados actos corruptos que ha cometido, liberando a asesinos y delincuentes a más no poder.
En 2010, ella, junto con otros 19 jueces fueron sancionados por tergiversar la ley en los juicios.
La juez Ludivina García Rosas y su secretario Agustín Torres Bello, del Juzgado Primero de Primera Instancia del Distrito Judicial de Papantla, fueron sancionados por corruptos.
El Tribunal Superior de Justicia ordenó enroque de jueces de Primera Instancia en los distritos de Papantla y Córdoba, por lo que tomó posesión como Juez Primero de Primera Instancia, en este Distrito Judicial, José Eduardo Roberto Garcés Martínez, en sustitución de Ludivina García Rosas, quien tomó el mismo cargo en Córdoba.
Como es de su costumbre, el Tribunal Superior de Justicia del Estado cada que le evidencian las corruptelas de sus jueces a éstos únicamente los cambian de ciudad, en lugar de cesarlos y procesarlos, es como si aquí agarran a un ladrón en la Alameda y en lugar de enviarlo a la cárcel lo mandan a la Colonia San José a que siga robando, pero ahora a otros ciudadanos. Así es la impartición de justicia en los juzgados.
REDACCIÓN
EL BUEN TONO


