Córdoba. – La mañana de ayer, en una conocida estación de radio, Cristina Buganza de Carús dio una entrevista representando al patronato del río San Antonio. En dicho encuentro invitó a la audiencia a dejar de criticar y mejor ayudar. Sin embargo, se confunde, porque ayudar a un Ayuntamiento corrupto no es ser altruista, sino ser su cómplice.
Lo único que ella logra con andar mendigando ayuda para ese río, es hacer que Tomás@elalcahuetedePortillayLavín, no gaste ni en escobas y tenga así más recursos para robar. En lugar de mendigar a otros ignorantes que las apoyen, deberían de invitarlos a ir a exigirle al Alcalde, porque tiene los recursos suficientes para embellecer ese río.
Además, éste es conocido como el robo del año por la constructora Pitalua, la cual recibió 100 millones de pesos de nuestros impuestos para el embellecimiento del mismo. Ahora, Cristina Buganza ¡propone no criticar y mejor irlo a barrer! Lástima que ni con todas esas señoras barrenderas que se pasan todas las mañanas recogiendo la basura, sembrando plantitas y pintando murales, quedará como los paseos de los ríos de otros países de primer mundo, donde los ciudadanos no sólo saben pagar sus impuestos, sino exigirle a sus autoridades los servicios acorde a los impuestos que pagan.
Sin embargo, escuchamos a una Cristina invitando a ayudar y dejar de criticar con tal sentimiento a flor de piel, que estamos seguros de que si la entrevista hubiera durado 10 minutos más ¡la señora llora! Cooperarán para ahorrarle al Alcalde y que así le sobren recursos para robar más ¡sentido común! Lástima que no muchas personas lo tienen.
Hoy, los cordobeses pagamos ya por estacionarnos en nuestro Centro Histórico, con los famosos parquímetros, que le han dado a Tomás más de 9 millones de pesos. En lugar de invertir ese dinero en parques, paseos en el río, estadios, escuelas, hospitales y tantas cosas que hacen falta en esta ciudad, lo que hizo fue subirle el sueldo a sus regidores un 30 por ciento, mientras el patronato del Río San Antonio anda pidiendo escobas y recogedores.
Invitamos a la señora Buganza de Carús a que le pregunte a su marido si conoce alguna empresa que le aumente a sus empleados el sueldo en un 30 por ciento. Vaya, que ni la más productiva de este país da esos aumentos ¡ni en dos años ni en tres años, que es casi lo que lleva Tomás!
Pero estamos en un México lleno de burros domesticados, que creen que el ser Alcaldes les da permiso de saquear la ciudad y esclavos satisfechos, como las señoras del Patronato ¡que confunden el “altruismo” con la complicidad!
Tomás cuenta con un presupuesto de más de 800 millones de pesos al año ¿alguien ha visto alguna obra que represente ese presupuesto? ¿Le alcanzará al corrupto de Tomás con ese presupuesto mantener limpio, sembrado y pintado el paseo del río San Antonio? ¿O lo que vemos es un Ayuntamiento lleno de oportunistas vividores, amigos de Tomás, robandose el dinero y una ciudad que a lo único que aspira es a que le tapen los mismo baches que se hacen en sus calles cada año?
Desde luego, una ignorancia indiscutible de la señora Buganza en esa entrevista mañanera… Si Buganza de Carús fuera artista, sería el equivalente a La Legarreta.
