


AGENCIA
Caracas.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, rechazó la intervención de Estados Unidos en el país y anunció el despliegue de 4.5 millones de milicianos tras el incremento de la recompensa por información que conduzca a su captura a 50 millones de dólares.
En un acto televisado, Maduro calificó como una humillación la presencia de bases militares estadounidenses en Suramérica y aseguró que sus mares, cielos y tierras son defendidos, patrullados y vigilados por Venezuela, y que ningún imperio tocará suelo venezolano.
El mandatario indicó que el despliegue forma parte de un plan de paz y exhortó a las milicias a estar preparadas, activadas y armadas, sin precisar en qué regiones del país se concentrarán los efectivos.
Estados Unidos ha desplegado alrededor de 4 mil agentes, principalmente infantes de Marina, en aguas de Latinoamérica y el Caribe para combatir a los cárteles de narcotráfico, reforzando su presencia con aviones, barcos y lanzamisiles. La fiscal general estadounidense, Pam Bondi, informó de la incautación de 700 millones de dólares en bienes vinculados a Maduro, acusándolo de narcotráfico.
Bondi destacó que la recompensa de 50 millones de dólares por la captura de Maduro es histórica y lo calificó como uno de los mayores narcotraficantes del mundo, señalando su vinculación con organizaciones como el Cártel de Sinaloa y el Cártel de los Soles. Según la DEA, se han incautado 30 toneladas de cocaína relacionadas con Maduro y sus socios, incluyendo casi siete toneladas directamente vinculadas al mandatario.
El gobierno venezolano repudió la recompensa ofrecida por Estados Unidos. El canciller Yván Gil, a través de Telegram, calificó la medida como una patética burda operación de propaganda política y la cortina de humo más ridícula que han visto.
El anuncio de Maduro y la reacción de su gobierno reflejan la creciente tensión entre Caracas y Washington, en medio de acusaciones de narcotráfico, vínculos con grupos terroristas y despliegue militar en la región.

