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nace una leyenda

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CÓRDOBA.- Una noche especial se vivió ayer en el gimnasio San José, inmueble que registró un lleno para presenciar el adiós de Ringo Acosta de la lucha libre después de 40 años de trayectoria; fue una función especial e histórica donde el ídolo cordobés enfrentó a sus máximos rivales por última vez en el ring y salió con los brazos en lo alto al ganar esta función estelar y con ello retirarse con un triunfo y como campeón de los encordados. Momentos especiales se vivieron en esta función, primero con la respuesta del público cordobés y de la zona Centro que llenaron el inmueble, segundo el reencuentro de los hermanos Acosta, Apolo, Duende y Ringo.

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¡Adiós, Malasia!