Orizaba.- Hasta 220 terapias y consultas a personas con problemas neurológicos y musculo-esqueléticos, es la atención diaria del Centro de Rehabilitación Integral de Orizaba. Los pacientes son desde niños de dos meses de edad hasta adultos de 90 años, indicó la directora Angélica Andrade.
Enfatizó que por la demanda de servicios en el CRIO y para evitar saturaciones, es necesaria la contratación de por lo menos dos médicos y tres terapeutas, sin embargo, con la falta de recursos no es posible.
Refirió que para que lo anterior sea una realidad y con ello mejore la atención a los pacientes de 26 municipios de la zona Centro, es indispensable la aportación de las autoridades municipales, los empresarios del corredor industrial del valle de Orizaba y de la población en general.
Acotó que desde que el CRIO se fundó ha logrado mantenerse gracias a la buena voluntad de las personas que cooperan de forma periódica.
“El CRIO no depende de ninguna instancia, ni recibe un subsidio federal o estatal, aunque sí hay municipios que nos dan su donativo mensual, sin duda, gran ayuda para la institución, pero aún así no es suficiente”, expresó.
Detalló que en las gratificaciones de las 21 personas que laboran en el centro de rehabilitación y los gastos de energía eléctrica, gas, limpieza, mantenimiento y la reparación de aparatos terapéuticos, se erogan entre 300 y 350 mil pesos mensuales.
“En el CRIO hay buena voluntad, pero tiene que ir de la mano de las aportaciones económicas de la ciudadanía, para atender a los pacientes. Se ha perdido mucho la cultura de la donación, pero uno nunca sabe cuándo podemos estar frente a un problema de discapacidad”, puntualizó la directora.
