Amatlán.- La obra de reparación de la calle Galeana se ha convertido en un flagelo para sus habitantes, al obstaculizar la circulación que comunica a la congregación de La Patrona con la cabecera municipal.
Los habitantes han mostrado su inconformidad, ya que refieren que obligan a los conductores de vehículos particulares adentrarse “en un laberinto” de colonias que no conocen y les ocasiona pérdida de tiempo.
La vecina Margarita Zavala indicó que hay zonas donde sí se necesitan obras, pero el alcalde Miguel Ángel Castro Rosas no las atiende.
“Hay calles en el olvido, llenas de lodo en esta temporada de lluvias, pero el alcalde no hace nada por componerlas” refirió.
Ante esta situación los habitantes piden al presidente municipal que agilice las reparaciones de la calle Galeana y que haga obras en otras colonias que en verdad lo necesitan.
Raúl Rodriguez
El Buen Tono
