La Región.- Centros de Salud en mal estado, desabasto de medicamentos (sólo 25 por ciento en existencia), falta de material de curación, desabasto de vacunas, mobiliario destruido y bodegas utilizadas como consultorios forman parte de la gama de servicios que la Secretaria de Salud en el Estado ofrece a la población usuaria.
Tras la serie de manifestaciones que los trabajadores de la subsección 8 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (Sntsa) de las jurisdicciones sanitarias de Córdoba y Orizaba han realizado desde el martes pasado en demanda a la mejora de sus condiciones se trabajo, ayer El Buen Tono realizó un recorrido por los Centros de Salud de Yanga y Cuitláhuac acompañado por personal sindicalizado, donde se pudieron constatar las condiciones de hacinamiento e insalubres en la que los pobladores reciben el servicio médico.
Desabasto de medicamentos:
un dolor de cabeza
El Centro de Salud de Yanga requiere por lo menos de un total de 248 claves de medicamento para atender a los más de 8 mil pobladores que solicitan el servicio, sin embargo, actualmente sólo cuentan con 75 claves en existencia.
De acuerdo al personal de jornada acumulada, la próxima semana se incorporarán unas 300 familias más que estarán demandando el servicio, es decir se sumarán aproximadamente mil 200 habitantes que solicitarán atención a través del Seguro Popular.
Sin embargo, y pese a la gran afluencia que mantiene este Centro de Salud, las carencias saltan al vista. De acuerdo a los señalamientos del médico de turno, únicamente cuenta con tres consultorios.
Cuando existe una gran demanda de consultas los pacientes son atendidos en una bodega improvisada.
La Secretaría exige que cada uno de los Centros de Salud cuente con un área de estipulación temprana, misma que no se ha podido instalar debido a la falta de espacios.
Hace un año delincuentes ingresaron al lugar y sustrajeron equipo de cómputo, impresoras, equipo de radiocomunicación y una pantalla de 50 pulgadas de la sala de espera.
A pesar de que se levantó el reporte de robo, el personal jurídico de la Jurisdicción Sanitaria VI no presentó la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público, según afirmó el médico de guardia.
A más de un año del robo, la Secretaría de Salud no ha repuesto el equipo robado, inclusive fue el propio personal quien pagó las reparaciones de las protecciones de la ventana por donde ingresaron los ladrones.
Aunque el Centro de Salud de Yanga cuenta con servicio de electricidad, no cuentan con lámparas suficientes.
El piso de los consultorios está destruido. Las puertas se están cayendo y los lavamanos están tapados, además de que la basura se ha acumulado en la parte trasera.
Crecen las anomalÌas
Al visitar el Centro de Salud de Cuitláhuac el panorama no fue menos desalentador.
En su interior se encontró un inmueble sombrío y sucio entre las sillas de espera había vasos vacíos, envases de botellas, cubrebocas y otros desechos.
La falta de personal de intendencia obliga a los médicos a tener sus centros de trabajo en pésimas condiciones.
Aunque se turnan para realizar las labores de limpieza, sus esfuerzos son insuficientes.
Según explicó el personal a cargo, este Centro de Salud de Cuitláhuac atiende un promedio de 50 localidades aledañas, divididas en seis núcleos de aproximadamente 400 familias.
Para la población que recibe el servicio, el área de farmacia sólo tiene en existencia 103 de las 203 claves médicas requeridas (cifra menor a la demanda).
En octubre arrancará la Semana Nacional de Vacunación y únicamente cuentan con 20 dosis de neumocoxica, pentavalente y rotavirus, el resto de los biológicos no han sido entregados.
No tienen ni alcohol
La falta de material de curación en este Centro de Salud ha obligado al personal a solicitar a los pacientes la compra de alcohol, gasas y guantes, en caso de solicitar el servicio.
Las féminas que acuden a practicarse el papanicolau deben comprar el espejo vaginal (que cuesta 25 pesos en las farmacias) y un paquete de guantes quirúrgicos de 10 pesos.
YESSICA MARTÕNEZ ARG‹ELLES
El Buen Tono
