Córdoba.- A un año de haberse inaugurado una sucursal más de la cadena comercial The Home Depot en el municipio, ferreteros continúan sufriendo por la competencia desleal y bajas ventas que les genera.
Una de las principales barreras que tiene los pequeños comercios es que al no poder competir con la guerra de “precios y ofertas” reducen sus ventas y fuentes de empleo, se calcula que a la fecha 20 ferreteras han cerrado.
El dueño de una conocida ferretera ubicada en la zona sur de la ciudad, Ernesto Sánchez lamentó el hecho que las autoridades municipales le hayan apostado a las grandes cadenas comerciales extranjeras, sin importarles las afectaciones para el comercio local.
Dijo que tan sólo en lo que va de este año de funcionamiento de The Home Depot las ventas para los dueños de estos comercios han caído hasta en un 70% generando el cierre de 20 ferreteras.
“Las grandes firmas no sólo compiten con los que tenemos nuestros changarritos, sino con vendedores de materiales de la construcción, de pisos, línea blanca, cocinas y azulejos y eso también les esta pegando a la economía local porque el dinero no se queda en Córdoba”, dijo.
El entrevistado aseguró que de no haber una alternativa para ellos, esta en riesgo la permanencia de las ferreteras locales a pesar de mantener precios más bajos y contar con mayor calidad en sus productos.
Se quejan de mal servicio
y robos al interior
La firma de The Home Depot además de exterminar a las ferreteras locales, ofrece publicidad engañosa y poca seguridad para los usuarios.
La semana pasada la señora Carmen Romo acudió a la sucursal para realizar una compra, el personal que ahí labora ofreció un descuento especial en artículos del área de jardinería.
Según relató la afectada al momento de pagar en caja, el personal le manifestó que el descuento no era valido debido a que tenía que realizar una compra más elevada a la que planeaba realizar.
Por su parte, otra de las visitantes quien pidió permanecer en el anonimato, aseguró haber acudido a la tienda durante el pasado martes en un momento de distracción dejo su bolso sobre el carrito de compras, minutos éste había desaparecido.
A pesar de que la agraviada pidió apoyo al personal, fue ignorada e incluso se le impidió solicitar la presencia de los elementos policíacos, bajo el argumento de que esto dañaría la imagen de la cadena.
De la redacción
El Buen Tono
