


Córdoba.- Tal y como se esperaba de ellos desde el principio de esta administración municipal, los regidores Iván Antonio Espinoza Hermida y Elisa Paola De Aquino Pardo, protegidos de Víctor Serralde, incumplen con su deber de presentarse a trabajar, a pesar de los jugosos sueldos que cobran.
Es notorio, y cualquier ciudadano que quiera puede constatarlo con sus propios ojos, que estos dos jovenzuelos, —buenos para nada porque ni estudios profesionales tienen—, por lo menos en las últimas dos semanas, no se han aparecido por sus oficinas en el Palacio municipal, en donde, al menos por vergüenza, deberían acudir a cumplir con las comisiones que les fueron asignadas.
Sin embargo, a ninguno de los dos se les ha visto ni por accidente en el edificio. Incluso, a Iván Antonio Espinoza, quien “dobletea” funciones como presidente del PAN, tampoco se le ha podido localizar en las oficinas del partido, donde se pensaría que despacha, al no estar en Palacio, donde es solapado por el alcalde Tomás Ríos y el resto de la Comuna, quienes también hacen como
que trabajan.
Si hubiera un récord, como se hace en la Cámara de Diputados, de los regidores faltistas, estos dos “porros”, Iván y Elisa, —vergüenza del verdadero panismo—, serían los ganadores de tan lamentable récord, por no asistir a devengar el jugoso salario que sale de los impuestos de todos los cordobeses, cuya suma, por estos dos nefastos personajes, asciende a más de 110 mil pesos mensuales, además de que también se les paga un asistente con un salario de 15 mil pesos mensuales, los cuales son igual o peor que ellos: unos buenos para nada.
de la redacción
el buen tono


