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San José de Abajo sigue en el abandono; Martín Rico se va sin atender a la comunidad

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Tinta Ácida
EL BUEN TONO

Cuitláhuac, Ver.- Hace algunos días, el desbordamiento del arroyo en San José de Abajo arrasó con la tubería de agua potable, dejando sin suministro a decenas de familias. Aunque el hecho evidenció la vulnerabilidad de la comunidad, la administración municipal de Martín Rico no ha dado respuesta ni muestra de interés por resolver las múltiples carencias que enfrenta esta población.

Los habitantes señalan que, desde el inicio de su gestión, el alcalde ha sido un gobernante ausente, indiferente y negligente. Hoy, en la recta final de su periodo, temen que ya no exista voluntad ni recursos para atender problemas tan graves como la falta de agua, la inseguridad y el abandono en infraestructura.

La indolencia del ayuntamiento se refleja también en la nula prevención ante los desbordamientos del río, un riesgo latente que nunca se atendió con medidas de protección civil. Tampoco hubo obra pública ni acciones concretas para mejorar las condiciones de vida en la comunidad, que ha sido borrada de la agenda municipal.

El abandono es generalizado: no hay patrulla, no hay ambulancia y el alumbrado público es deficiente, lo que convierte a San José de Abajo en tierra de nadie. El alcalde jamás se coordinó con las autoridades auxiliares, dejando a la población en total vulnerabilidad ante la inseguridad y la falta de servicios.

Para colmo, cada vez que una tormenta eléctrica golpea la región, los habitantes se quedan de tres a cuatro días sin energía eléctrica, sin que el municipio intervenga para exigir soluciones inmediatas. Así, entre apagones, inseguridad y falta de agua, Martín Rico cierra su administración como un alcalde que solo administró el abandono y el desprecio hacia su propia gente.

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