

Fortín.- Reprocha el regidor quinto Humberto Danes no ser tomado en cuenta por las autoridades municipales, ya que al parecer, están tomando decisiones “en secreto”, de ahí que este jueves calificara a la sesión de Cabildo “de un cochinero”, ya que el miércoles se les entrega una orden para sesionar que sólo unos minutos antes de someter al Cabildo fue modificada. “Resulta que el día de la sesión no era lo que se había programado, no puedo aprobar algo a ojos cerrados”, señaló.
Mencionó que todo apunta a que estas modificaciones de obra fueron precabildeadas entre el alcalde Armel Cid y los ediles, sin tomarlo en cuenta, a lo que apuntó: “a todos se nos debe tomar en cuenta sin ver a qué partido político pertenecen”.
Además de recriminar el haber sido hecho a un lado, reprobó que sus compañeros aprobaran fácilmente unas modificaciones de obra que, sin duda, afectarán a
la población.
Y es que de la propuesta original de obra, las autoridades “sacaron” acciones relevantes y en su lugar pusieron acciones sin importancia. La primera propuesta de inversión contemplaba 14 obras, de las cuales sólo quedaron ocho para efectuar.
Como ejemplo, citó, una de las obras tan clamadas y necesarias es la pavimentación de la calzada Tlacotengo, para la cual se aplicaría una inversión de 2 millones de pesos, aproximadamente, y que el director de Obras Públicas, Agustín García tanto pregonó.
Esta obra “sin más, fue sacada del programa que se contemplaba para este año, con el fin de re programarla para el siguiente año, pese a que es una exigencia ciudadana por las condiciones en que se encuentra, por los grandes baches que presenta, en su momento el director de Obras Públicas, incluso, había anunciado que se aplicaría concreto hidráulico, lo cual, una vez más, queda
en promesa.
Celia DÌaz GarcÌa
El Buen Tono
