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Se pierden más de 4 mil especímenes

Superiberia

Ixtaczoquitlán.- Se pierden hasta cuatro mil especímenes de plantas de la región por las constantes explosiones de investigación del suelo en Ixtaczoquitlán, efectuadas por cementos Apasco, dicen pobladores de diversas zonas del municipio.

La empresa cementera provoca las detonaciones utilizando explosivos que dañan el medio ambiente y han provocado que unos 20 metros se hayan perdido del cerro de Buena Vista en Ixtaczoquitlán, todo con el fin de extraer el mineral que utilizan para realizar la mezcla de cemento que producen.

Antonio Saldaña, quien lleva más de 60 años viviendo en la región, dijo que diariamente la empresa realiza explosiones para investigar dónde hay depósitos de la piedra que utilizan para elaborar cemento, y que el año pasado se realizaron hasta 180 explosiones, las cuales provocan una gravísima destrucción de la flora y fauna del lugar.

Asimismo, otros habitantes vecinos de la zona, quienes solicitaron el anonimato, expresaron su preocupación, pues dijeron que las plantas que son derribadas en la zona, muchas de las veces, no se vuelven a regenerar y que en toda la historia de vida que llevan de vivir ahí, ninguna autoridad de Medio Ambiente ha llegado al sitio para realizar un diagnóstico de la flora y fauna que ha dejado de existir en el lugar.

Señalaron además, que tan sólo en enero se han llevado a cabo 15 detonaciones, y que por cada una de ellas se perdieron hasta 25 árboles y plantas, las cuales marcaron para medir el impacto de las deflagraciones, y de esa forma miden el daño ambiental, esta información no la tiene ninguna autoridad del municipio.

“Por tanta explosión tenemos ya algunos desperfectos en la estructura de unas 172 casas, de las personas que habitan cerca al lugar de las detonaciones; igual número de lozas se han cuarteado, paredes, banquetas, pisos, puertas y sus marcos, así como las ventanas”; sin embargo, la empresa Holcim aún no les ha dado una respuesta sobre si les va a reparar su hogar o van a pagar los daños que ellos mismos han ocasionado.

Concluyeron que el pasado 30 de octubre de 2015, dejaron un oficio dirigido al Coordinador de operaciones de la cementera, Andrés Contreras, para que se realizara una inspección ocular de las viviendas afectadas por estas explosiones, pero que no se ha podido realizar dicha inspección y no saben a qué causas sea atribuible el atraso de la misma y continuán esperando.

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