Agencias
Uruapan, Michoacán.- Tras el asesinato del alcalde Carlos Manzo, la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó el “Plan Michoacán por la Paz y Justicia”, una estrategia que busca frenar la violencia en la entidad mediante el envío de fuerzas federales y la presencia reforzada de la Guardia Nacional en Uruapan y otros municipios.
El plan se organiza en tres ejes principales:
1. Seguridad y justicia
- Incremento de la presencia policial y de la Guardia Nacional.
- Coordinación con la Fiscalía Estatal y la Oficina de la Presidencia.
- Mesas quincenales de seguridad para evaluar avances.
- Sistemas de alerta para presidentes municipales y mecanismos de denuncia anónima contra extorsiones.
2. Desarrollo económico
- Impulso a salarios dignos para jornaleros y trabajadores agrícolas.
- Convenios con el sector productivo para fortalecer la economía regional y generar empleo.
3. Educación y cultura para la paz
- Escuelas de cultura de paz y programas de reinserción social.
- Becas de apoyo a estudiantes universitarios.
- Centros deportivos y regionales de cultura para fomentar actividades que promuevan la convivencia pacífica.
A pesar de estas medidas, la estrategia enfrenta un reto importante: décadas de inseguridad estructural en Michoacán. La ciudadanía y los alcaldes habían solicitado apoyo con anterioridad sin obtener respuesta, lo que plantea dudas sobre por qué estas acciones se implementan únicamente tras un hecho trágico.
La presidenta anunció que este fin de semana se dará a conocer la implementación completa del plan, con medidas específicas para prevenir la violencia y garantizar justicia para los habitantes. Mientras tanto, la pregunta sigue siendo si estas acciones podrán realmente detener la violencia endémica y brindar seguridad duradera en la entidad.


