Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- A sus 83 años, la vida de don Jorge Reyes es una sinfonía de experiencias y pasiones que lo han llevado a convertirse en figura importante de la música ranchera en Orizaba. Su viaje musical comenzó en 1958, a la temprana edad de 18 años, con la fundación del “Mariachi Orizaba”.
Con más de 50 años dedicados al mariachi, don Jorge Reyes ha sido testigo de la evolución de la música ranchera. Sin embargo, decidió dejar el grupo para emprender una nueva etapa. Ahora, se le puede observar en el parque Castillo, llevando consigo su vasta experiencia y su voz inconfundible.
“La gente que me escucha se me acerca y me pide una tarjeta de presentación”, compartió don Jorge Reyes. Estas interacciones son su forma de promoción, y en ocasiones, resultan en invitaciones para amenizar fiestas. Aunque los trabajos no son constantes, su amor por la música lo mantiene en movimiento.
Con ocho trajes en su guardarropa, don Jorge Reyes destacó la importancia de la vestimenta en el mariachi. Cada traje, y dependiendo de detalles y arreglos, puede llegar a costar alrededor de 5 mil pesos. Su atuendo majestuosamente blanco y adornos dorados es una expresión de su dedicación y respeto por la tradición.
La travesía de don Jorge Reyes lo llevó fuera de su tierra natal, buscando fortuna en otros estados. En Puebla, tuvo la oportunidad de conocer a un periodista, quien le abrió las puertas de la radio y la televisión. Ahora, acompañado de una bocina y un micrófono, sigue compartiendo su talento en la ciudad que lo vio nacer artísticamente.
La historia de don Jorge Reyes es más que una travesía musical, es un legado de pasión, perseverancia y amor por la música ranchera que sigue resonando en los corazones de quienes tienen la fortuna de escucharlo.
