

Boca del Río.- En la lucha contra la violencia y la barbarie es fundamental que hombres y mujeres tengan conciencia de tres códigos de manera cotidiana, el respeto, que unifica a la humanidad, pero también el de la gratitud y reciprocidad, manifestó la premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú.
Consideró que dichos principios constituyen una herencia de los mayas, aunque siguen vigentes en la actualidad.
Refirió que siempre dijeron que expresar gracias hacia los demás debería hacerse por lo menos 400 veces al día, por lo que una personas que combina tales elementos se convierte en un ser especial.
Manifestó que en la pareja también se debe tener presente un código de reciprocidad, coexistencia, pero sobre todo complementariedad entre el hombre y la mujer.
“El objetivo en el mundo es alcanzar la plenitud de la vida, porque una cosa es vivir bien y otra tener una vida plena, para dejar de ser una persona oprimida se debe analizar primero quién soy yo y qué puedo dar a los demás, para olvidar la crítica hacia los otros que no lleva a
nada”, expresó.
Destacó que el ser humano se debe preguntar cuál es el legado que quiere dejar, porque no sólo se trata de una lucha en abstracto, “debemos analizar por ejemplo el rol de las mujeres, nuestros derechos que hemos ganado con muchas batallas, pero debemos alcanzar una conciencia de salud tanto espiritual como material. Tener capacidad de autoestima.
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