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Región.- A partir del 1 de diciembre, los prestadores del servicio de transporte de carga que transitan por vías de jurisdicción federal deberán expedir a sus clientes un Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI), de tipo Ingreso con complemento Carta Porte.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT). dio a transportistas, generadores de carga, intermediarios o agentes de transporte 31 días de prueba para expedir el complemento Carta Porte, lapso en que podrán cometer errores en la elaboración del documento.
Pero, la medida no los exenta de repercusiones que afectan a las empresas de transporte o logística y a sus clientes usuales.
A partir del 1 de diciembre, en solo 21 días, no podrán deducirse los servicios de transporte de bienes o mercancías con un CFDI de tipo Ingreso sin complemento Carta Porte.
La medida del SAT afecta las finanzas y administración de los clientes del servicio de transporte y ello implicará que busquen a otra empresa que sí expida la factura con el complemento para cumplir con los requisitos, a fin de llevar a cabo las deducciones fiscales.
El pasado 3 de mayo, la autoridad fiscal del País determinó que los transportistas deberán viajar con el CFDI de tipo Ingreso con complemento Carta Porte para acreditar el traslado de bienes o mercancías en territorio nacional.
La regla se modificó, de forma que los operadores que transiten por vías de jurisdicción federal expedirán una factura con su complemento Carta Porte por cliente y por viaje realizado, así que detallarán cada uno de sus ingresos y ya no podrán facturar de forma masiva por semana o mes.
Aplica lo mismo para el servicio de transporte local o reparto urbano, únicamente que quedó exento de elaborar el complemento Carta Porte. Sin embargo, lo que no se logró ajustar para ambos casos, es la expedición del CFDI de Ingreso antes del viaje e incluso el SAT ya definió cómo corregirlo cuando cambian las cantidades finales.
Consideración
Un empresario consideró que el SAT en lugar de ir contra los jóvenes de 18 años, debería cobrar impuestos a los alcaldes, que además de no pagar, se roban los recursos del pueblo.
