


De la redacción
El Buen Tono
Orizaba, Ver.- En plena temporada vacacional, los animales del Paseo del Río de Orizaba, oficialmente declarado como Unidad de Manejo Ambiental (UMA), permanecen expuestos durante más de 12 horas diarias al contacto visual constante de cientos de turistas, situación que, según especialistas, puede generarles estrés crónico, daños psicológicos y una baja en sus defensas.
De acuerdo con la Ley de Vida Silvestre del Estado de Veracruz, en su artículo 39 Bis, los santuarios de animales deben garantizar un trato ético, evitar la alteración de la biología animal y prohíben actividades de exposición o entretenimiento. Sin embargo, en la práctica, lo que ocurre en este espacio se asemeja más a “un circo disfrazado de UMA”, pues los ejemplares son utilizados como atractivo turístico en lugar de priorizar su bienestar.

