Xalapa, Ver.— A pesar del despliegue institucional y del discurso oficial que presentó la elección judicial como un “mandato histórico”, en Veracruz el resultado fue todo lo contrario: más de 3.8 millones de votos fueron nulos o con recuadros sin marcar, lo que representa un alarmante 35.7% del total de sufragios emitidos en la entidad.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional Electoral (INE) , Veracruz se ubica entre los estados con mayor porcentaje de sufragios inválidos, junto con San Luis Potosí (43.2%), Durango (36.1%) y Chihuahua (33.2%). A nivel nacional, el promedio de votos nulos fue de 10.8% y el de recuadros sin llenar de 12%, sumando un total de 22.8% de votos inutilizados.
Millones de boletas, millones de dudas
En Veracruz, uno de los padrones electorales más grandes del país, se registraron 10 millones 709 mil votos únicamente para la elección de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Sin embargo, más de un tercio de estos fueron anulados o quedaron incompletos. La confusión, el desinterés y la falta de información fueron factores determinantes en este fenómeno.
En todo el país, la participación general fue mínima: apenas el 13% del electorado acudió a votar. Cada boleta permitía seleccionar hasta nueve personas para ocupar una curul en la Corte (5 mujeres y 4 hombres), pero bastaba con dejar vacíos ocho espacios para que el voto se considerara inválido.
¿Un mandato histórico?
Más de 500 millones de votos se imprimieron para seis elecciones judiciales, pero millones quedaron sin usarse, anulados o incompletos. En Veracruz, el 35.7% de esos votos se perdió entre la apatía, la confusión o el hartazgo.
Una alerta para la democracia
El caso veracruzano debe servir como alerta. La participación ciudadana no se impone ni se presume: se construye con credibilidad, información clara y procesos legítimos. Cuando más de un tercio del electorado anula su voto o lo deja en blanco, el mensaje no es de apoyo democrático, sino de desconfianza y desconexión.
