Orizaba.- Pese a la oposición de los vecinos para la realización del puente atirantado, en el cruce de las vías férreas, ayer se iniciaron los trabajos de la obra, que tardará cerca de ocho meses y costará unos 60 millones de pesos, situación confirmada en el Palacio municipal, por el coordinador de Comunicación Social, Román Rodríguez Marín.
“La construcción del puente dio inicio desde las 07:00 horas, este miércoles, justo a la altura del cruce de las vías del ferrocarril con el panteón Juan de la Luz, en el tema de las mamparas que colocó Tránsito para dar vialidad a la gente que entra de Ixtaczoquitlán a Orizaba, la vialidad será desviada a la altura de la Facultad de Ciencias Químicas hasta la avenida Orizaba, sólo para el transporte público, incorporándose hasta llegar al panteón o Calle Real”, explicó.
Actualmente, la parte en la que se trabaja es para colocación de la primera pileta, del lado Oriente de las vías, carril de subida a la ciudad, se conoció.
Respecto al consenso con los vecinos que serán afectados, así como los negocios, Rodríguez Marín destacó que en realidad no es preocupante, ya que la obra se cataloga como una urgencia, para ello, citó las declaraciones de Horacio Fadanelli, reconocido fotógrafo, quien catalogó como urgente y apremiante el puente.
En tanto, referente a los cierres viales, detalló que estos serán muy pocos y por corto lapso, pues las etapas de construcción permitirán en su mayoría que las vialidades sean habilitadas para manejar tráfico a contraflujo, durante los ocho meses que dure la obra, exceptuando diciembre, en el cual quedará libre la vialidad, por ser el mes donde el flujo de la economía es mayor para la ciudad, retomando la obra hasta enero.
