Córdoba.- Con la encomienda de llevar el mensaje de Cristo a todos los sectores sociales, así concluyeron las actividades de la Semana Santa en la Diócesis de Córdoba. Ante el inicio de la Pascua, la comunidad católica celebró la intensa participación de la población en general, pero sobre todo de los jóvenes en la tarea de evangelización.
Ayer arribaron a la Catedral de la Inmaculada Concepción los 116 jóvenes misioneros de la Pastoral Juvenil que fueron invitados a vivir una Semana Santa diferente. Cada uno permaneció durante una semana completa en comunidades rurales para apoyar en las tareas de evangelización con la población.
Tras celebrar el éxito de este año, el Obispo Eduardo Patiño Leal reiteró que es señal de alegría el hecho de que el mensaje de Cristo, muerto y resucitado por amor, ha llegado a todos los habitantes. Con el inicio de la Pascua, serán otros 50 días en los que habrá de mantenerse la meditación de Jesús entre nosotros.
“No vamos solos, Cristo resucitado siempre va con nosotros y nos ayuda a vencer nuestras deficiencias y dificultades para tener siempre posibilidad de crecimiento, bienestar y esperanza”, dijo.
En medio de la fiesta por la celebración de la resurrección de Jesús, Monseñor insistió que este tipo de emociones deben ser llevadas a todos los ámbitos. “Aunque la emoción no se manifieste de modo espectacular, el buen testimonio de un cristiano o mujer cristiana siempre se verá reflejado en el trabajo, la escuela y el hogar”.
