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Condicionan cuotas en las escuelas de la región

Superiberia

Orizaba.- Sociedades de padres de familia y directores de escuelas de nivel básico en la región, condicionan cuotas económicas por encima de brindar un espacio a estudiantes.

 

Es por mencionar en algunos planteles educativos como en las escuelas primarias Orizaba, Manuel M. Herrera y el kínder Roberto Owen, en donde los padres son obligados a pagar cuotas para apartar lugar de cada estudiante y material didáctico.

 

Es en el kínder Roberto Owen ubicado al norte de la ciudad en donde las madres de familia señalaron que la inscripción cuesta otros 300 pesos y además deben solventar el pago de 300 pesos para el material.

 

Es en este caso la Directora quien cobra las cantidades antes mencionadas, ya que de lo contrario de no pagarlas son obligados a solventarlas antes de salir del fin de cursos pues si no entregan el pago la Directora los amenaza con no entregarles la documentación necesaria.

 

Por otro lado en las escuelas primarias, por ejemplo, en la Manuel M. Herrera son los padres de familia quienes se oponen a que los padres inscriban a sus hijos sin pagar una cuota, por lo que de no contar con el dinero son obligados a firmar un documento y les dan únicamente 15 días para pagar la totalidad.

 

Son 250 pesos de inscripción y 100 de papelería, además los padres se veían obligados a hacer largas filas para poder escoger al docente que más les convenga, es decir, formaban los primeros 36 padres de familia y pedían al maestro o maestra que consideraban era el mejor del plantel.

Aseguran que los que quedan en segundo término como opción para que impartan las clases, no son escogidos en primer lugar debido a que no se comprometen con su trabajo, por lo que al parecer la mejor evaluación de cada docente la puede hacer el mismo tutor quien conoce a ciencia cierta quien brinda y no su labor al estudiantado.

 

Finalmente es en el caso de la primaria Orizaba en donde por cada padre de familia se solventa la cantidad de 300 de inscripción, 100 por cada menor para papelería, pero de no solventar los costos no los dejan inscribirse o los exhiben durante las juntas, aunque lo más recurrente es que no les apartan el lugar para  el alumno.

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