Corren los días en los que se nos infla el pecho por la soflama patriota. Nuestros símbolos como El Escudo y La Bandera, están por todos lados. Son los Días Patrios.
A la lluvia natural de la época del año, se agrega la política y la financiera…
Sí, así llegamos a los Días Patrios.
APERITIVO: FESTEJOS PATRIOS
La noche del 15 todo fue efervescencia.
Previo, en la mañana, se había anunciado que no habría cena o fastos en el Palacio Nacional. El horno no está para bollos.
Vivimos tiempos de recortes y el panorama económico es más complejo que un sudoku. Afuera hay también un hervidero político, espoleado por una mezcla de patriotismo y un nacionalismo exacerbado, tras lo que puede conocerse como “el error de septiembre”: Traer a Trump a México.
La noche del 15 había tres contingentes en la celebración del Grito en el Zócalo y sus alrededores: el contingente de personas o acarreados que trajeron en autobuses del Estado de México, para que ocuparan las primeras filas de la plancha del Zócalo.
Después, las personas que tradicionalmente asisten a la verbena popular con motivo de la celebración del 206 Aniversario de la Independencia de México; y tres, una marcha que exigía la renuncia del Presidente; la movilización se quedó en avenida Juárez, tras toparse con los granaderos que impidieron su ingreso al Zócalo. Acabó instalada en el Hemiciclo al Benemérito de las Américas, al lado de Bellas Artes.
Es cierto que llegamos a festejar nuestra Independencia con el llamado mal humor social, en tiempos difíciles.
Después se disipó un poco la mañana siguiente, con el tradicional desfile militar, que como siempre, el pueblo disfruta y reconoce la labor de las Fuerzas Armadas, así como la impresionante disciplina e infraestructura militar.
Este año se celebró el 50 aniversario del Plan DN III y el Plan Marina, para apoyo a la población en caso de desastres, así como el Centenario de la Industria Militar que florece.
México es y será siempre más grande que sus crisis y que sus gobernantes, no cabe duda.
¡Ay, los días patrios!
PIATTO FORTE:
SE HUNDE EL PESO
¿Cómo llegamos a los Festejos Patrios este 2016? Además de todo, con el dólar casi a 20 pesos. Hubo un momento en la jornada previa que el precio alcanzó los 19.70 pesos mexicanos por un dólar. Todo un récord.
De hecho, el dólar respecto del peso batió dos récords… ¡En una misma semana! ¿Qué diablos ocurre?
Ocurre una gran cantidad de cosas, pero son básicamente tres factores los que mantienen al peso mexicano hundido.
El primero: es la incertidumbre que se genera, previo a la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, en la que se prevé aumentar las tasas de interés. El segundo es la debilidad de nuestra economía, expresada principalmente en el impacto a nuestras finanzas públicas en los bajos precios del petróleo.
Y el tercer factor, las elecciones de Estados Unidos. A los mercados, de piel sensible, les genera mucha incertidumbre la potencialidad de que Donald Trump llegue a la Casa Blanca.
