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El PRI sin camisa… de fuerza

Superiberia

 

Nadie debe sorprenderse —mucho menos indignarse— por los cambios a los estatutos de ese partido, sobre todo para despojarse de la camisa de fuerza que les obligaba oponerse a la inversión privada en Pemex y al IVA generalizado en medicinas y alimentos.

Estos son otros tiempos… lo que funcionó al PRI siendo oposición, ahora estorba siendo gobierno.

No se puede trabajar sin recursos… y no habrá recursos sin una reforma energética profunda que libere la pesada carga fiscal que ahorca a Pemex… Y sobre todo otra hacendaria que aplique el IVA parejo a todo (y a todos) y evite evasión y privilegios. Cualquier otro esfuerzo fiscal resultaría ineficiente por insuficiente.

Por eso el líder nacional, César Camacho, abre candados sin aspavientos… habla de malabares estatutarios para otorgar a la hacienda peñanietista más recursos para educación, salud, seguridad y justicia… y convertir los estatutos del PRI en instrumentos políticos.

Eso explica la rasurada al artículo 154 del Plan de Acción que comprometía al partido tricolor a defender la economía popular y no aceptar la aplicación del IVA en alimentos y medicinas.

Los 800 delegados estatales, reunidos este fin de semana, hicieron su chamba. Dieron madruguete y sabadazo… Y liberaron a su partido de esa camisa de fuerza que los ataba.

Primero vendrá la iniciativa priista de reforma energética, luego la fiscal. Ninguna es ocurrencia gratuita… Si la inversión privada en Pemex es viable, y si la aplicación del IVA generalizado a alimentos y medicinas puede discutirse, es porque ambas iniciativas pueden imponerse. ¿O, qué no?

Si el presidente Peña Nieto quiere sus reformas —energética y fiscal—, habrá de exorcizar viejos demonios. Primero, el dinero privado en el petróleo… y sobre todo el del IVA… el mismo que apareció en marzo de 1995 cuando el PRI nos recetó su aumento con todo y roqueseñal… el mismo que el propio PRI decidió conjurar el sexenio pasado tras avalar el aumento a 16%, con cargo a la administración de Felipe Calderón.

A diferencia de aquella ocasión, esta vez el PRI-gobierno no tendrá a quién facturarle los costos.

El episodio de los 700 cambios a los estatutos del PRI concluirá el próximo domingo, cuando la XXI Asamblea Nacional los avale… con el presidente Peña Nieto de testigo.

MONJE LOCO: El gremio artístico sigue de luto… apenas hace una semana murió don Joaquín Cordero, último grande de la Época de Oro del Cine Mexicano… Y  ahora se nos va doña Carmen Montejo. Ambos compartieron pantalla con Pedro Infante (¿Qué te ha dado esa mujer?, 1952). Doña Carmen también deja huella como una de las últimas leyendas del cine mexicano. 

PUNTO Y APARTE: Pocos saben que esa etapa gloriosa mucho le debe al general Lázaro Cárdenas. En 1939, el Presidente  decretó la proyección obligatoria de películas mexicanas en todas las salas del país. De ahí surgieron estrellas inolvidables: Además de Infante, Jorge Negrete, Pedro Armendáriz, Luis Aguilar, Tito Guízar…; María Félix, Dolores del Río, Rosita Quintana, Miroslava, Flor Silvestre, Marga López… En las películas cómicas, Cantinflas, Tin Tan, Palillo, Joaquín Pardavé… ¿Sería porque antes los decretos presidenciales sí funcionaban?

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