Fortín. – Familiares, amigos y compañeros de entrenamiento de Pablo Ortigoza, un joven boxeador de 19 años, se manifestaron frente al Palacio Municipal de Fortín para exigir justicia por su asesinato a manos de un policía municipal.
El alcalde Gerardo Rosales Victoria no había dado la cara, hasta este lunes cuando la familia y amigos fueron a buscarlo al palacio para exigirle renuncie.
Los hechos ocurrieron la madrugada del viernes 28 de febrero, cuando Pablo regresaba a su casa y fue interceptado por elementos de la Policía Municipal de Fortín en la colonia Ricardo Ballinas. Durante la intervención, uno de los policías, identificado como Zurit Abel “N”, le disparó en la cabeza, causándole la muerte instantáneamente.
Durante la protesta, los asistentes expresaron su indignación y exigieron justicia para Pablo, quien además de ser un destacado boxeador, era estudiante del Tecnológico de Orizaba.
