


De la redacción
El Buen Tono
Orizaba, Ver.- La reciente fractura en una de las placas de vidrio de la Atalaya de Cristal, ubicada en el cerro del Borrego, está generando más preguntas que respuestas. Mientras una usuaria denunció públicamente que el daño ocurrió justo cuando caminaba sobre la estructura, el alcalde Juan Manuel Diez Francos declaró que podría tratarse de un acto de vandalismo, lo que generó inquietud por el tipo de mensaje que se proyecta.
Aunque en ningún momento se ha señalado directamente a la visitante como responsable, la narrativa oficial -que sugiere que el daño se produjo desde la parte inferior del cristal durante la noche- podría, por sentido común, dar pie a interpretaciones que rozan la revictimización.
De acuerdo con el presidente municipal, el desperfecto se detectó el domingo y fue necesario que interviniera Protección Civil del Gobierno del Estado para clausurar la zona afectada, ya que inicialmente el Ayuntamiento no tomó medidas para cerrar el acceso, por lo contrario se negó rotundamente a cerrar el sitio, una vez más haciendo su santa voluntad.


