Orizaba.- Los dos cadáveres hallados en estado de putrefacción continúan en la morgue, en espera de ser identificados y reclamados por sus familiares; las autoridades ministeriales siguen con las investigaciones para intentar identificarlos.
Según se conoció, ninguno de los dos cuerpos presenta alguna característica que ayude a identificarlos, pues carecen de tatuajes o alguna otra seña particular, además de que el alto grado de descomposición impedía incluso determinar una edad aproximada.
El hallazgo de dos cadáveres en menos de 24 horas provocó la movilización del personal de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), primero a la congregación de Rancho Pala, del municipio de Ixhuatlancillo, y posteriormente en el municipio de Ixtaczoquitlán, en las inmediaciones de los “500 Escalones”.
El cuerpo en Rancho Pala estaba amordazado y al parecer le dieron el “tiro de gracia” en la cabeza, para luego enterrarlo en una fosa clandestina.
Mientras tanto, el cadáver en la hidroeléctrica, presentaba orificios que indicaban que pudo haber sido ultimado a balazos, por lo que también se presume que fue asesinado.
Hasta el momento, los restos de estas dos personas permanecen en las funerarias de Orizaba, sin que alguna persona se haya acercado para identificarlo ante las autoridades ministeriales.
de la redacción
El Buen Tono
