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Yunes usa el erario para dejar el poder a su hijo

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  • Candidato de Morena lo denuncia por el desvío de recursos públicos para la campaña de su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez

CDMX.- El estado de Veracruz, gobernado por Miguel Ángel Yunes Linares, se ha convertido en un cementerio clandestino. En sus dos años al frente del Estado, el panista poco ha podido hacer para detener la “ola” de violencia que se vive en la Entidad, tal y como lo prometió durante su campaña.
Ahora, a pocos días de los comicios para elegir a un nuevo mandatario para el Estado, Veracruz vuelve a ser noticia luego de que el actual Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares fuera señalado por el desvío de recursos públicos para la campaña de su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez.
El candidato al Gobierno de Veracruz, de la coalición Juntos Haremos Historia, Cuitláhuac García, denunció a Miguel Ángel Yunes Linares, actual mandatario, por el desvío de recursos públicos para la campaña de su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez.
García Jiménez y el presidente estatal de Morena, interpusieron dos denuncias ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) en la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Xalapa.
Los morenistas aseguraron que la Administración de Yunes Linares utilizó el principal programa del estado, Veracruz Contigo, para repartir con fines electorales, despensas y monederos electrónicos de la tienda departamental Chedraui con hasta mil pesos de saldo.

VERACRUZ: TIERRA DE DESAPARECIDOS
Las cifras revelan que el territorio veracruzano se ha convertido en un cementerio clandestino. Entre 2010 y 2017, localizaron 343 fosas donde el crimen organizado sepultó de manera ilegal cuerpos de personas.
Las inhumaciones irregulares que se ubicaron en 44 de los 212 municipios existentes en Veracruz han arrojado la escalofriante cifra de 225 cuerpos, 335 cráneos y más de 30 mil 600 fragmentos humanos.
Las autoridades reportaron 3 mil 500 personas sin localizar hasta 2016, pero las organizaciones sociales cifran en 20 mil el número de desapariciones, pues muchos familiares jamás denuncian por temor.
El 1 de diciembre del 2016 durante su toma de protesta como Gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, aseguró que mejoraría la seguridad en la Entidad y “cimbraría al País”.
Dos días después de tomar posesión, el Gobernador se comprometió a dar prioridad a la búsqueda de personas desaparecidas. Sin embargo, el Mandatario no sólo no cambió la distancia que las autoridades mantenían con las víctimas durante la Administración del PRI, sino que ha sido señalado de entorpecer los esfuerzos para hallar restos de familiares. El eslogan “Rescatemos Veracruz”, del entonces candidato, parece haber quedado en una promesa. (Tomado de SinEmbargo).

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