in

El minutero

Superiberia

 EL SELLO DE HONOR

Los más viejos, los que vivieron los históricos años treinta y cuarenta del siglo pasado, y que siguen vivos, relatan como una proeza el haber participado en la cruzada nacional convocada por el entonces presidente de la República, Lázaro Cárdenas del Río para acopiar los recursos monetarios para pagar a las empresas extrajeras la expropiación de la industria del petróleo. El pueblo respondió al llamado del mandatario y muchos aportaron lo que tenían a la mano: ahorros en efectivo, cosechas, terrenos y hasta animales domésticos –pollos, marranos, cabras, caballos y borregos- para acopiar los fondos que hicieran posible la nacionalización de la industria petrolera. Y se logró

Así, desde 1938, la nación recuperó la propiedad de los hidrocarburos en el subsuelo y desde entonces la empresa creada, Petróleos Mexicanos (Pemex) es el motor del desarrollo del país. De Pemex salen los presupuestos para escuelas, hospitales, seguridad social, desarrollo urbano, financiamiento a municipios y demás. Sin Pemex, México estaría más postrado de lo que ahora está. Pese a ser la “gallina de los huevos de oro”, como se ha definido a la paraestatal, el priismo dinosáurico que regresó a Los Pinos con copete nuevo quiere venderla a los empresarios extranjeros. A esa intención se han sumado los panistas y los perredistas coludidos con el tricolor y las mafias de cuello blanco.

 Empero, la nación comenzó a moverse. Los grupos de izquierda, los activistas, los obreros, los maestros, los estudiantes, los campesinos y los integrantes de organizaciones no gubernamentales, ya están en pie de lucha. Sólo falta que alguien los cohesione en torno a la defensa del patrimonio nacional. Se espera que esa figura de unidad se Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, hijo del expresidente que hace más de 70 años recuperó la industria petrolera que estaba en manos de los extranjeros. El ex jefe de Gobierno del Distrito Federal y tres veces candidato presidencial, volvió al ánimo de todos los mexicanos durante el evento realizado en el Distrito Federal hace un par de días cuando lazó el llamado para la defensa del petróleo.

Cárdenas también convocó a una consulta nacional en la que se pretende obtener un millón 630 mil firmas que sustentan el repudio total a la modificación de los artículos 27 y 28 de la Constitución Política del país que impulsa el peñismo, el priismo y sus lambiscones. Esa es la punta de lanza para una protesta nacional, la cual deberá encender a toda la nación si logran unirse las figuras emblemáticas de la izquierda, las organizaciones civiles y la población en general, víctima de los excesos de la clase política. Actualmente los líderes emblemáticos de la defensa de la soberanía nacional son Cárdenas y el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, que lleva largo tiempo denunciando los actos de corrupción y desmantelamiento de empresas públicas por parte de los gobiernos priistas y panistas.

Ambos, unidos y convocando al pueblo pueden detener la tarascada de los facinerosos contra la riqueza petrolera y la soberanía nacional. Hoy es el momento para que por segunda vez en la historia reciente del país el pueblo responda a ese llamado y salga a defender lo suyo, a detener a esa banda de ladrones y vende-patrias. Hacerlo, será el sello de honor de la presente generación, la cual podrá contar a sus hijos, nietos, bisnietos y si se puede, tataranietos la proeza que hicieron para salvaguardar el patrimonio de la nación. ¿No creen?

En contraparte y aún con toda la campaña mediática y en redes sociales que pagan, ni el tricolor ni el panismo logran convencer a los mexicanos de la mentira que encierra sus propuestas de reforma energética. A esos partidos, por supuesto, les hace falta figuras de la talla de Cárdenas. A nivel federal, el PRI lleva a personajes que son verdaderos pillos para dar la cara, entre ellos el ex candidato presidencial, Francisco Labastida, famoso en su momento por el caso Pemex-Gate, a través del cual se desviaron miles de millones de pesos para su campaña electoral a través del sindicato petrolero que dirige otra de las ratas mayores del país, Carlos Romero Deschamps. 

Mientras tanto, en el PAN, la figura que destaca en la defensa de la reforma privatizadora es el dirigente nacional Gustavo Madero Muñoz, descendiente del héroe independentista Francisco I. Madero, quien seguramente se volvería a morir de ver a su parentela arrodillada frente al capital extranjero. Esos son los personajes de descredito, sumados al mismo Peña Nieto, a César Camacho Quiroz, a Luis Videgaray, a Ernesto Cordero, Santiago Creel y demás coludidos para hincarle el diente a Pemex y a la industria eléctrica. Y qué decir de Veracruz donde la noche del pasado lunes el PRI estatal realizó una asamblea local de apoyo a la propuesta de reforma del copetón Peña Nieto pero la misma se convirtió en un aquelarre de fantasmas. Pura morralla.

Vaya, hasta reapareció en las fotos de los boletines el fallido candidato a la diputación federal por Córdoba, Francisco Cessa Servín y la candidata perdedora en el municipio de Emiliano Zapata, Shariffe Osman. Además, el ex alcalde boqueño Salvador Manzur, quien fue destituido de la Secretaría de Finanzas por el escándalo de los videos de mapaches electorales que estalló en mayo e hizo tambalear al Pacto por México y Ranulfo Márquez que fue exhibido en los mismos videos y suspendido como delegado estatal de Sedesol. Esos son los que buscarán convencer a los veracruzanos de respaldar la propuesta peñista aunque más que dar certeza, dan lástima.

 

LOS ROJOS CONTRA EBRARD

 Ayer estuvo en el puerto de Veracruz y Xalapa el ex jefe del Gobierno del Distrito Federal y actual aspirante a dirigir el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Marcelo Ebrard, quien anda en campaña rumbo a la renovación de la dirigencia nacional de ese instituto político. Lo particular de su gira por Veracruz es que el llamado “PRD rojo” – o Partido de la Revolución Fidelista- lo repudió y con apoyo de la Coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado lanzó una campaña de ataques mediáticos en su contra y en la cual, el dirigente espurio a nivel estatal, Sergio Rodríguez Cortés, afirma que Ebrard no tiene los tamaños para dirigir al partido.

Simplemente no hay nivel y bien dicen que la ignorancia es atrevida. Y para medir la verdadera lealtad del ex alcalde de Ciudad Mendoza, que se hizo del control del partido en Veracruz con apoyo del Gobierno estatal y del innombrable, basta recordar la declaración hecha la semana pasada en referencia al nombramiento del ex dirigente estatal del tricolor, Erick Lagos Hernández como titular de la Secretaría General de Gobierno. Rodríguez felicitó al priista y dijo que “con Eric sí nos entendemos muy bien” pero en contraparte, afirma que con los de su mismo partido, entre ellos Marcelo Ebrard no se entienden. Sobran las explicaciones hacia quienes es la lealtad del mendocino.

La descalificación del dirigente rojo hacia el ex jefe del Gobierno capitalino fue respaldada por otro rojo-amarillo, el ex diputado local, Manuel Bernal, quien al estilo de los líderes sindicales comprometió el voto de todos los militantes perredistas en la entidad para el ex senador Carlos Navarrete, integrante de la corriente Nueva Izquierda que apoya la privatización de Pemex.Y claro, la maquinaria del PRD rojo y del Gobierno estatal contra Marcelo Ebrard es porque no conviene que llegue a la dirigencia nacional ya que impulsaría una purga interna en el PRD de Veracruz que echaría a todos los líderes espurios e impuestos por el priismo y la fidelidad.

 

“MEJOR RECEN”

 El secretario de Salud en Veracruz, Juan Nemi miente al decir que no se han suspendido tratamientos médicos en los hospitales públicos tras el retiro del personal de la empresa Finamed. La realidad lo desmiente pues los enfermos han salido a las plazas públicas y a los medios informativos en Xalapa, Córdoba, Coatzacoalcos, el puerto de Veracruz y Poza Rica para decir lo contrario y relatan historias dramáticas. Por ejemplo, en Tierra Blanca donde hay una epidemia de males renales que ha sido desatendida desde hace muchos años, decenas de pacientes se quedaron si las sesiones de diálisis y hemodiálisis. El familiar de uno de ellos relata que de plano los encargados del hospital les dieron las bolsas de solución química, sondas y agujas para que el proceso de diálisis lo hicieran en sus domicilios pese a que hay un enorme riesgo de que el paciente adquiera una peritonitis si no se hace con la asepsia necesaria. 

“Nos recomendaron que nos laváramos bien las manos los que íbamos a hacerle el lavado peritonal al enfermo y nos pusiéramos guantes que nos dieron, además que utilizáramos un cuarto aislado y desinfectado y que manualmente realizáramos el bombeo para circular el liquido de las bolsas al organismo de mi hermano”, cuenta. El “intercambio” –así se le llama al proceso de diálisis- manual y “casero” fue la única opción para que el paciente no se quedara sin la diálisis y corriera más peligro al retener líquidos tóxicos, explica en una carta uno de los afectados y que por supuesto pide el anonimato porque los funcionarios estatales son capaces de excluir a su hermano de toda cobertura médica por tales declaraciones.

“El peligro de una peritonitis infecciosa es muy alto y de presentarla es mortal en la mayoría de los casos, eso lo sabemos y expresamos nuestras dudas a las enfermeras que nos dieron, amablemente, el material para hacer el proceso de diálisis”, agrega. La respuesta de los trabajadores fue devastadora: “encomiéndese a Dios para que no suceda, es lo que les podemos decir, mejor recen”. Esto desbarata el discurso de que los servicios de diálisis y hemodiálisis estén subrogados y cubiertos por instituciones privadas. Por si no bastara, Juan Nemi reclama también a los medios de comunicación, responsabilizándolos de apoyar a la empresa Finamed, a la que él declaró como “enemiga” del Estado. Vaya desfachatez que pide la solidaridad de la prensa en un asunto tan mal oliente. 

Lo que se requiere no son linchamientos mediáticos como propone el burócrata sino una investigación judicial sobre un contrato leonino que durante la fidelidad fue entregado a esta empresa cuyos propietarios se desconocen con exactitud pero hay una danza de especulaciones sobre la existencia de prestanombres para ocultar a políticos corruptos que estarían detrás de la firma. En el 2008, el congreso local aprobó el convenio con Finamed burlándose de todos pues un texto fue hecho público y otro diferente fue signado en la oscuridad porque esa fue la voluntad del gobernante en turno para entregarle 6 mil 400 millones de pesos al consorcio. Ahora se rompió el amor entre Finamed y el Gobierno estatal, dejando al descubierto la cloaca, aunque el saqueo financiero ya lo cometieron.

CANAL OFICIAL

Gobernación y labia

Olla de grillos