Por CARLOS MOTA / columnista
Los empresarios son muy celosos de su dinero y podrían moverlo fácilmente a otras latitudes
Probablemente la reunión más importante que ha tenido lugar entre el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y el sector empresarial fue la que reveló el propio AMLO ayer. Si se lee bien la relevancia de este encuentro podría decirse que es la piedra angular que faltaba para dormir tranquilos a sabiendas de que los capitales más destacados del País están en el mismo barco que el presidente. Una gran noticia.
Al parecer AMLO no tenía planificado revelarlo, pero finalmente lo hizo así:
“Hace cinco días me invitaron a comer, a casa del Sr. Alberto Baillères, diez empresarios. Desde luego Slim, Germán Larrea, Servitje, Antonio del Valle… así diez… y fue un encuentro respetuoso, agradable. Y, ¿de qué se habló? Del País, y de cómo ayudar todos a sacar adelante a México. Nadie habló de que van a invertir en otros países porque no hay condiciones en México. Nada de eso. En el caso de Baillères el tema es que uno de los contratos que tiene para la explotación del petróleo está ya madurando y van a empezar a extraer crudo”.
Yo pude intercambiar información con uno de los diez asistentes. Me refrendó la intuición: fue algo que valió mucho la pena para devolver la confianza a los empresarios e inversionistas en general, porque literalmente me dijo: “sí fue una reunión muy positiva”.
Tomando como válido que ambas impresiones del encuentro, la del Presidente y la de los empresarios fue optimista, habría que pensar que lo que sigue debería ser una renovación del aparato gubernamental (incluso estatal y municipal) para enfocarlo en acompañar las inversiones; es decir, a las palabras deben seguir los hechos, y AMLO deberá instruir a todos sus colaboradores y seguidores a respetar, cuidar y alentar la inversión privada.
El Presidente parece haberse dado cuenta en las últimas ocho semanas de que el País no crecerá —y no se desarrollará— sin una constante reiteración de un mensaje a favor del sector privado. Los empresarios son muy celosos de su dinero y podrían moverlo fácilmente a otras latitudes. Pero creen en México tanto como AMLO y, lo extraordinario de este encuentro y de otros que han ocurrido con empresarios de Jalisco, Michoacán, Nuevo León y con los banqueros, es que estamos entrando en una franca ruta de diálogo constante con el sector empresarial.
Es altamente probable que en este segundo semestre veamos ajustes a la estrategia de Gobierno derivadas de la comida de AMLO. Ya por lo pronto ayer dijo que el espinoso tema de los gasoductos se está resolviendo…
DANONE “MADRE TIERRA”
Poderosa la iniciativa Madre Tierra de la firma Danone, que se compromete en Michoacán junto con Grupo Altex a desarrollar en ese estado un clúster enfocado en la producción de fresa. La compañía francesa dijo que todo objetivo de negocio debe estar vinculado al progreso social.
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Esta columna fue
publicada en
El Heraldo de México
