Ahora que El Sr. Madero presidente de Acción Nacional demandó a nuestro gobernador el Dr. Duarte de Ochoa según por lo que él considera un mal manejo de programas federales, recordé la imagen de un noticiario televisivo en el cual una señora se quejaba con el Sr. Presidente Don Felipe Calderón, por el retraso en el pago del programa de oportunidades. Cuando el Sr. la interrogó, ella contestó que era maestra y le confesó que ganaba $16,000 pesos mensuales (¿cuantos mexicanos ganan esta cantidad?); En ese momento me dije: aquí se va a lucir mi presidente, seguramente llamará a los responsables que otorgaron esa prebenda a quién obviamente no tiene necesidad, pues con ese sueldo muchos de nosotros la consideraríamos en una posición bastante privilegiada, y los castigará rigurosamente por quitarle la ayuda que ofrece el programa a otra persona que realmente la necesita; desgraciadamente el Sr. presidente sólo se limitó a hacerle un ligero reproche, el cual me decepcionó mucho, pues al fin y al cabo el dinero pertenece a todos los contribuyentes, Y EL PROGRAMA ESTABA SIENDO MANEJADO DE UNA MANERA INADECUADA. La pregunta obligada es: ¿Quién y por qué incluyó a esta maestra en el programa? ¿Sería acaso por un favor electoral? Casi seguro, pues al menos en el estado de Veracruz conozco varios municipios panistas y otros perredistas en los cuales los programas federales favorecen a personas que tienen un alto ingreso económico (en un municipio conurbado hasta un prestamista cobra en uno de estos programas, y es demostrable) sólo por el voto ¡La mayoría de los partidos en el poder lo han hecho!
En nuestro concepto el Sr. Madero tiene razón si lo que dice es cierto, pero que sea congruente, pues antes de ver la paja en el ojo ajeno debería ver la viga en el propio. Que recuerde que el ex presidente Vicente Fox un tanto cínico y un tanto imprudente como suele ser cuando abre la boca, públicamente expresó: Felipe Calderón ganó gracias a mi esfuerzo y cooperación, es decir se valió de su poder presidencial para manipular las elecciones, y seguramente digo yo, fue con su fortuna personal; como cuando siendo aún apenas presidente electo, no en funciones, pidió 7 millones y según recuerdo de dólares para reconstruir (perdón, acondicionar su rancho, hoy centro de convenciones) porque iba a recibir al Sr. Bush presidente de los Estados Unidos, debiendo haberlos pedido en todo caso para invertirlos en el castillo de Chapultepec por ejemplo, o en cualquier otro edificio público en cualquier parte de la República y ahí recibirlo. Y esta cantidad alcanza para muchas cosas, más que para una campaña electoral en los municipios veracruzanos ¡Exija, si! Pero cuídele las manos a los de su partido también.
¡Aclaro! Lo antes dicho no son calumnias de mi parte, esto lo dijo la televisión en su momento. Ni siquiera sé si se vale pedir esas cantidades para beneficio personal, o si otros presidentes lo hicieron también, pero que yo recuerde el único en hacerlo público fue este Sr. Y utilizar esta cantidad para su provecho, en un país en que mueren 11,000 personas por hambre cada año, ¡Esto sí que debiera indignarnos! ¿Por qué no indaga Sr. Madero si procede una demanda en este caso?
Pudiera ser que me acuses de repetitivo, si es que me has leído en otros artículos, querido lector, pero debo insistir en que todas las actividades públicas se transparenten y la mejor manera es que éstas se suban a las redes sociales, de manera que cualquiera de nosotros tengamos acceso a información de tantas cosas “chuecas” que abundan en el país, y podamos hacer algo (aunque sea escribir en algún diario) para cambiarlas. Ojalá que la famosa ley de trasparencia no vaya ser sólo el tema del discurso demagógico, y se lleve a cabo con la severidad que requiere.
