Orizaba.- El miedo y la ignorancia hacen que la población mate a las lagartijas llamadas geckos y que son conocidas como besuconas, por el ruido que emiten, señaló el biólogo Miguel Ángel de la Torre Loranca, quien aseguró que son totalmente inofensivas, pero sí muy necesarias.
Explicó que debido al cambio climático y el calentamiento global, esta especie, que no es autóctona de Veracruz, ha tenido que migrar, propiciando que vayan colonizando nuevas regiones y es el caso de la zona.
Dijo que lamentablemente la población les tiene miedo por mitos infundados y totalmente falsos, como es que se puedan introducir por orificios del cuerpo, como nariz, oídos y otros más privados, y comerse desde el cerebro hasta otros órganos, “dejándote tonto o muerto”; además, refirió, tampoco son venenosas.
Sin embargo, dijo que cumplen una función en el ecosistema y hasta un beneficio para la gente, agregó que son lagartijas que sirven como controladoras de la población de insectos, cucarachas, hormigas, “lejos de generar un perjuicio generan un beneficio”.
Reiteró que la especie no es de la región de Veracruz, pero que llegó de las partes tropicales con la migración humana, por lo que se especula que sean más de tres especies de geckos en el Estado. “Son lagartijas muy prolíficas que anteriormente no se veían en la zona”.
Las besuconas o geckos en un ambiente natural tienen sus propios enemigos, sin embargo, en las casas, al tener comida con los insectos, proliferan, por lo que las personas las consideran como una plaga, pero “el único daño que puede llegar a causar estos animales en los hogares es a los aparatos eléctricos, pues hacen sus nidos en ellos y llegan a afectar los cables”.
