Ya basta de juegos partidistas, engañosos y traicioneros al pueblo veracruzano que se debate en medio de la ignorancia y de la pobreza de más de cinco millones de habitantes!
Con la suspensión de derechos partidistas de Javier Duarte de Ochoa, es sólo dar tiempo al tiempo para ver si se salva de la vorágine política que ocasionaron los últimos tres gobernadores, Miguel Alemán Velasco, Fidel Herrera Beltrán y él, quienes de hecho están aniquilando al Partido Revolucionario Institucional, situación que vino sucediendo paulatina y lentamente con los anteriores gobernadores, y hoy se presenta la espantosa crisis de ese partido, y parece que están cegados, y no quieren ver la realidad.
Fueron ochenta y seis años de hegemonía de ese partido político, donde con algunas excepciones, han perjudicado al pueblo veracruzano, y que ahora llevará más de treinta años para que se levante y vuelva a resurgir para bien de los habitantes de esta entidad federativa.
Ahora el pueblo veracruzano lo que espera es la acción y aplicación de las leyes que están muy claras en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las locales, pues el enriquecimiento ilícito del jefe de la banda y sus colaboradores, es decir, Alí Babá y sus cuarenta ladrones, no tienen desde ningún punto de vista perdón, pues esa mafia lo hizo a sabiendas de dejar a un pueblo en la miseria, y lo peor, con todas las puertas cerradas de las instituciones crediticias.
Que verdaderamente se aplique la Ley Anticorrupción, pues supuestamente todas las pruebas están fehacientes, y comprobadas, por lo que si no se quiere que el tiempo siga pasando, la Ley debe aplicarse, pero ¡Ya!
¿Acaso las autoridades correspondientes seguirán esperando para ver si ocurre otra cosa que favorezca a los presuntos delincuentes de la clase política?
¿Acaso las autoridades no están viendo lo que está ocurriendo en esta Entidad Federativa con diarias manifestaciones de descontento, pidiendo que a los trabajadores del Estado les paguen lo que les adeudan, así como todos los sectores que han sido afectados por esta situación financiera por la que se está atravesando?
De hecho ya hay ingobernabilidad en el Estado de Veracruz, que es totalmente peligrosa, que se puede convertir en una parálisis general donde se provocarían mayores riesgos para la ciudadanía.
¿Acaso eso es lo que se quiere para que se utilice la fuerza Pública, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, donde recordamos el mes de diciembre 2015, cuando fueron agredidos jubilados y ciudadanos en general, por exigir sus pensiones y otros rubros?
El Estado de Veracruz está totalmente en la ruina, por lo que requiere dinero para solventar todos los compromisos que están pendientes, causados por las malas administraciones, por lo que, lo más conveniente sería congelarle las cuentas bancarias al Gobernador, así como de los supuestos indiciados, es decir, su pandilla, así como recogerles todas las propiedades que tienen en el país, y ver como también se vea la manera de hacer lo mismo con las que existen en el extranjero.
Que se recuerde que, según notas periodísticas, vigilarlo para que no vaya a emprender la graciosa huida, tomando el avión que supuestamente tiene en el Aeropuerto de Lencero, como ya ha ocurrido con otros personajes de la clase política de otros Estados, que ya desaparecieron, sin haber sido sometidos a las leyes para que se haga justicia.
Todo esto nos dice la gravedad política por la que está atravesando el Partido Revolucionario Institucional, y aún así, otros integrantes de ese instituto manifiestan que desean lanzarse en las elecciones para Gobernador y Presidencia de la República, sin querer reconocer que todos ellos han sido copartícipes del total desprestigio del que goza ese partido, y ninguno de ellos hicieron algo en favor de regularizar de esa situación.
